Todos sabemos lo que el ser humano puede ser capaz de hacer,
desde crear una simple herramienta de madera y piedra, hasta los edificios más
altos y la más sofisticada tecnología digital, pero todo inició por una simple
y sencilla palabra, “necesidad”. La necesidad nos ayuda a crear e inventar
siempre algo más, primero comienza como un reto y luego se generan más retos y
así evolucionamos buscando una solución, pero estos sólo son para aquellas
personas que les gusta vivir emociones intensas, personas como muchas que hay
en el mundo, personas como Ronald.
Ronald Pier Molina Macha con 38 años de edad, creó su propia
pequeña empresa en San Juan de Miraflores (Lima – Perú) un distrito pintoresco
y emergente, que va creciendo poco a poco junto con la creatividad de sus
residentes. Gustón El Mejor Sanguchon con su característico color naranja y
blanco es su gran obra, una sanguchería, pero no es cualquier negocio ¿alguna
vez ha probado una hamburguesa casera? Si la respuesta es sí, entonces este producto
le va a encantar ya que, además de tener un ingrediente secreto que lo convierte
en un delicioso manjar, es de full carne de res molida, es decir la carne es
preparada allí mismo, además, sus salsas fueron hechas por una chef profesional
quien entregó estas únicas recetas a Ronald, sus producto tratan de guardar esa
línea de calidad optima que lo hace diferente del resto. Sin duda un difícil proceso
pero no imposible.
Como todo buen negocio , Gustón inició desde cero, seguir el
camino al éxito depende mucho del nivel de perseverancia de uno mismo, este
tiempo de perseverancia puede llegar hacer muy duro, pero cuanto más duro es,
más exitoso serás, como dice el dicho “Lo que fácil viene, fácil se va”. Este
dicho no se aplica a este joven emprendedor que pese a las habladurías supo
llevar un negocio que hasta el momento es el mejor en la zona.
Hace dos años era conocido como la carpita blanca, porque utilizaban
una carpa blanca de plástico en la vereda de su casa, dentro de esta iniciaban el
preparado del sanguchon y afuera de esta atendían a los clientes, quienes
llegaban en sus autos y se cuadraban esperando a que le tomen la orden desde
sus cómodos y cálidos asientos.
Por temas climáticos, refiriéndome estrictamente al invierno
y sus incesantes llovisnas, Gustón tuvo que buscar un lugar donde sus clientes
internos o trabajadores puedan estar más cómodos y de esta manera evitar
posibles resfríos o enfermedades y contaminación del producto, entonces no
tuvieron otra alternativa que buscar espacio en el garaje, pudo haber sido un
local en un avenida muy transitada pero las mensualidades eran muy elevadas y combinándolas
con las deudas, el costo aumentaba mucho más haciendo difícil de alcanzar el
sueño de un local comercial.
Todo esto no fue un problema para Ronald, ya que contó con
el apoyo y maravillosa creatividad de su familia quienes convirtieron un garaje
común y corriente en un bonito local comercial.
·
Me gusta la sonrisa de la gente que viene a
comprar, quizás podría decir que esta experiencia ha cambiado mi vida ya que
ser mi propio jefe no ha sido fácil.
¿Antes en que trabajabas?
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Era administrador de una discoteca, era un trabajo
de amanecida, donde paraba muy cansado y desganado sobre todo con mi familia y
mi esposa.
¿En qué estás pensando para mejorar la sanguchería?
·
Uff, tengo muchas cosas en mente, son mis objetivos
a alcanzar, entre ellas estoy tratando de crear una hamburguesa más saludable,
con mucho menos grasa y sobre todo sabrosa.
·
En realidad el producto en si es más saludable
que una hamburguesa normal, porque es casera, es como esas que comes los lunes
en tu casa junto con tus lentejas, con la única diferencia que no la preparamos
con aceite. Una vez vi un reportaje de los beneficios de la hamburguesa casera
por televisión y me quede sorprendido.
Ahora Gustón El Mejor Sanguchon tiene una nueva imagen con
un llamativo logotipo, mucho mejor que el antiguo, además ya está registrado en
indecopi cuyo proceso de registro fue una odisea y gracias a esta es conocida como
el “Caso Gustón” en la facultad de administración de la Universidad San Martín de Porres
.
El trabajo de Ronald no terminará pero tendrá la satisfacción
de saborear una gran victoria, sólo si persevera y sigua creando muchas cosas
novedosas y sobre todo deliciosas. Así como él hay muchos más con historias más
interesantes y que otros quisieran escuchar para poder aprender, de esta manera
escribir en una nueva página, de su libro de vida, una historia llena de retos
y experiencias que a la vez le sirvan a otros y a otros más haciendo cada vez
más grande este enorme circulo.